A partir de una revisión crítica de la noción de “sororidad”, entendida como la relación altruista yde complicidad que pueden mantener entre sí las mujeres, esta tesis explora los lugares que ocupa
la sororidad en La tía Tula de Miguel de Unamuno, Como agua para chocolate de Laura Esquivel,
y El Albergue de las mujeres tristes de Marcela Serrano. Éstas son novelas educativas en las cuales
existen personajes femeninos que en el siglo XX encuentran en la sororidad una herramienta que
les permite crecer y desarrollarse libremente. Mediante una metodología que alterna entre el
análisis cuidadoso de estas novelas, y el distant reading o el encuadre que coloca estos textos en
una historia más amplia, Crítica de la sororidad interviene en el uso excesivamente general que
se le da a la sororidad, proponiendo una nueva concepción del término. Esta tesis concibe la
sororidad al mismo tiempo como una herramienta de resistencia femenina y como punto de partida
fundamental para el crecimiento de la mujer moderna.